El martes 8 de marzo nos uniremos a miles de personas y empresas de todo el mundo para celebrar el #DíaInternacionaldelaMujer. En Steer compartiremos durante toda la semana mensajes de uno de nuestros empleados para concientizar sobre el tema de este año, #BreakTheBias.
Reconocemos que los prejuicios, ya sean deliberados o inconscientes, dificultan el avance de las mujeres. Sin embargo, no basta con saber que existen prejuicios, sino que hay que actuar para igualar las condiciones. Por eso, a lo largo de la próxima semana, compartiremos la historia personal de una mujer que cuenta su experiencia de "romper los prejuicios" aquí en Steer.
#wearesteer #mujereseneltrabajo #igualdad
En India nos queda un largo camino por recorrer para lograr la igualdad de género, pero confío en que algún día la alcanzaremos. Recuerdo un incidente que me hizo darme cuenta de lo difícil que sigue siendo para las mujeres trabajar en regiones remotas; durante una visita a una oficina en la parte rural de India, pregunté por el baño y me dijeron "¡no hay baño para mujeres porque no hay mujeres que trabajen en esta oficina! Sólo tenemos un baño para hombres".
Al final, decidí utilizar el baño para hombres. En situaciones como esta, se espera que las mujeres se avergüencen de la situación y den un paso atrás. Sin embargo, yo no dejé que eso ocurriera; me enfrenté a ello con confianza (¡y valentía!) y seguiré haciéndolo en el futuro y motivaré al equipo de Steer para que sea el mejor, ya sea en la oficina o fuera de ella.
Para las mujeres, la discriminación en el lugar de trabajo es lo más desalentador en cuanto a sus objetivos profesionales. Pero empresas como Steer están liderando el camino para “romper los prejuicios” y asegurar que las mujeres están preparadas para un crecimiento profesional equitativo. En Steer, siempre me he sentido motivada y sé que mi voz importa, que es la mejor sensación que se puede tener.
Creo que las empresas deben ofrecer la cultura y las condiciones necesarias para que las mujeres tengan las mismas oportunidades de demostrar sus aptitudes para prosperar en el trabajo y obtener recompensas.
Lo que intento hacer en mi trabajo diario es contribuir a la cultura y concientización de la igualdad en Steer, entendiendo y discutiendo las expectativas de mis colegas y ofreciendo igualdad de oportunidades en nuestros esfuerzos de licitación, en la entrega de proyectos y en el trabajo en equipo en todo Steer. A través de esta acción y de la ambición de apoyo, espero contribuir a retener y motivar a las mujeres con talento de Steer.
En mi opinión, la igualdad necesita tanto de las acciones diarias de una persona como de un marco empresarial que establezca objetivos de igualdad y los supervise. Así se garantiza la satisfacción laboral de todas las personas y un trabajo más dinámico.
Me apasiona lograr la igualdad de género en el lugar de trabajo e identificar soluciones para lograr la igualdad de género en el transporte.
Me incorporé a Steer el año pasado y me alegré de que uno de los primeros proyectos en los que trabajé se centrara en la concientización sobre la necesidad de conseguir la igualdad de género en la movilidad compartida y en la identificación de cómo se podría conseguir. También me he convertido en miembro de Women in Steer, cuyo objetivo es apoyar a las mujeres para que consigan carreras de éxito en Steer. He disfrutado discutiendo temas relevantes y de actualidad con otras personas del grupo.
Por mi propia experiencia, durante mi tesis de máster entrevisté a operadores de bicicletas compartidas y destaqué que a menudo las bicicletas se diseñan en función de las proporciones masculinas. No hay un enfoque único para todos, pero para algunas mujeres, las bicicletas pueden ser demasiado grandes, lo que limita el acceso a las mujeres que utilizan los sistemas de bicicletas compartidas. Por lo tanto, es importante asegurarse de que los sistemas de uso compartido de bicicletas sean inclusivos para todos los grupos y ofrezcan posibilidades de ajuste.
El hecho de que las mujeres suelan ser las principales cuidadoras es a menudo invisible en el entorno laboral, lo que puede repercutir negativamente en la carrera profesional de las mujeres. Ayudé a una colega con este problema cuando un cliente solicitó reuniones periódicas a última hora de la tarde, en un momento en que mi colega tenía que recoger a sus hijos del colegio. La apoyé (que era directora de proyecto y era fundamental para la ejecución del mismo) para que pidiera al cliente que reconsiderara cuándo podían realizarse las reuniones, incluso superando su sugerencia de que el camino a seguir era que mi colega se retirara del equipo. Me complace decir que rápidamente accedimos a reprogramar las reuniones y el trabajo que entregamos al cliente fue muy bien recibido.
Como resultado de éste y otros acontecimientos similares, he llegado a reconocer las responsabilidades de cuidado y a actuar conscientemente sobre ellas. Más tarde, otras personas del equipo empezaron a darse cuenta de los beneficios de estas acciones en un mejor balance entre la vida laboral y la personal, lo que confirma que si actuamos con sensibilidad hacia el género y otras características, esto puede ser mejor para todas las personas.
En el pasado, cuando asistíamos a reuniones, no era raro que las personas con las que nos reuníamos dieran por sentado que eran los hombres de nuestro equipo los que dirigían el proyecto, y esto influía en el trato que recibíamos. Esto ocurría sobre todo en países y culturas donde los hombres tenían tradicionalmente la autoridad.
Experimentar repetidamente este tipo de situaciones hace que la confianza en ti misma como mujer se reduzca, sobre todo si ocupas un puesto de liderazgo. El riesgo de abordar esto directamente es que algunos hombres pueden interpretarlo como que las mujeres somos "demasiado sensibles".
Por mi parte, fueron necesarias conversaciones con nuestros colegas para sensibilizarlos sobre el tema y poderlo abordar como equipo de forma positiva. Por ejemplo, ahora, en las reuniones, me presento a mí misma y a mis compañeros de trabajo por su nombre y su cargo, como una forma positiva y proactiva de evitar cualquier posible malentendido. Es importante que los colegas masculinos participen en estos "pasos".
He comprobado que los clientes corrigen rápidamente su comportamiento y agradecen la claridad. Y, por supuesto, tanto mis colegas mujeres como yo en Steer somos mucho más felices en nuestro trabajo.
Si ves algo, dilo: no dejes que tu silencio perpetúe el prejuicio.
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